Hay días, hay noches... dias insolubles, noches contubernias
Hay, hubo, abra, abreme
Todos pueden leerme, todos pero nadie entiende dos veces dos
¿Te has puesto a mirar la noche?
Esta carcomida, ella me tuvo en sus brazos y fue como la noche misma
Ya no la tengo en la boca, no existe
Supo de mi, yo la mire, observatibamente aunque no exista eso
Yo la mire, por q no tengo ojos pero leo almas perdidas
No te confundas, no se nada en absoluto
Pero la quice un poco, como esas cosas q no se nombran
¿te has puesto a rondar los días?
Estoy pecando, soy una creída
Pero no pueden lapidarme por ello, pues tambien se bisten de egoísmo
Se que encontraré donde resguararme un poco de éste sol que me quema las alas... te esperó lluvia, te esperó aunque no te conozco